Por más de medio siglo, el cielo colombiano ha sido testigo de los viajes de miles de héroes vestidos con uniformes azules, tapabocas y guantes que todos los meses, sin falta, recorren las rutas aéreas menos comunes hasta llegar a territorios apartados donde las comunidades, en fila, los esperan para hacer uso de sus servicios médicos. Se trata de la Patrulla aérea civil colombiana (PAC) una entidad sin ánimo de lucro fundada en 1966 por un grupo de pilotos privados con una gran vocación de servicio y amor por el país.