No fue el debut deseado de Rúben Amorim. El Manchester United empató en la visita al Ipswich Town y se aleja todavía más de los puestos europeos. El cuadro ‘red devil’ se adelantó tan solo empezar el encuentro, pero Hutchinson puso las tablas antes del descanso (1-1).
Con Amorim todavía disfrutando por primera vez del ambiente de la Premier League, su United ya mandaba en el marcador. Una carrera imparable de Amad Diallo por el carril derecho acabó en un centro medido para que Rashford marcara a placer el primer tanto en el minuto 2 de partido (0-1).
El entrenador luso apostó por un cambio de sistema con tres centrales (Evans, De Ligt y Mazraoui) y dos carriles con mucha profundidad (Dalot y Diallo). Una apuesta ganadora desde el inicio del encuentro, sobre todo por el buen nivel del futbolista marfileño en la banda derecha.
ORGULLO LOCAL
Tras el precoz tanto de los visitantes, las fuerzas se igualaron sobre el terreno de juego con un Ipswich Town que tiraba de empuje y orgullo. El cuadro que dirige Kieran McKenna llegaba con facilidad a las inmediaciones del área rival, pero le faltaba precisión en los metros finales.
Sammie Szmodics y Liam Delap obligaron a Onana a lucirse debajo de los palos con dos intervenciones de mucho mérito. Avisaban los locales hasta que Omari Hutchinson se cansó de advertir al filo del descanso. El delantero inglés se sacó de la maga un auténtico ‘cañonazo’, que tras tocar en la defensa del United, entró por la escuadra e igualó el encuentro en el Portman Road (1-1).
El Manchester United no tuvo la misma suerte en el inicio de la segunda mitad, ya que Alejandro Garnacho erró en la definición cuando se plantó en el mano a mano. En ningún caso se arrugó el cuado local, que tuvo muy cerca darle la vuelta al partido con un Delap que era un dolor de cabeza para la defensa ‘red devil’.
FALTA DE IDEAS EN EL UNITED
No lo veía nada claro Amorim desde la banda, y tiraba de sustituciones para agitar el partido a su favor. Y le sentaron bien los cambios al United, que volcó el juego hacia la portería contraria. Los minutos pasaban y no llegaba el gol en ninguna dirección.
El conjunto mancuniano estaba falto de ideas en ataque y no encontraba la manera de hacer daño al Ipswich. Sin tiempo para más, el debut de Rúben Amorim en el United terminó con un empate insuficiente para las aspiraciones ‘red devils’.