
El Gobierno de Isabel Díaz Ayuso maniobró el jueves porque no quiere comprometerse a estabilizar, es decir, a hacer fijas, las plazas de 1.091 profesores ayudantes doctor en las seis universidades públicas de la Comunidad de Madrid. El pacto que propone Morant, y que han aceptado las otras 16 comunidades autónomas, es que el Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades sufrague el 60% de los sueldos y el Ejecutivo regional el 40% ellos durante seis años. Para tratar de eludir la obligación de hacerlos fijos, su consejero de Educación, Emilio Viciana, envió un correo al ministerio, que no está dispuesto a cambiar una coma del programa María Goyri, que cofinancia 5.600 plazas en toda España. Este lunes, en un correo al que ha tenido acceso este diario, el secretario de Estado Juan Cruz Cigudosa contesta a Viciana: “Como sabes, todos los elementos del convenio (consideraciones y compromisos económicos de los firmantes, fechas de compromiso y propuestas de tipo de contratación), así como el texto en todos los términos literales, fueron elaborados y acordados con el resto de las comunidades autónomas. Así mismo, fueron finalmente aprobados con el voto positivo de la Comunidad de Madrid en la Conferencia General de Política Universitaria del pasado 19 de junio de 2024″.